Laida 28+6

Hola mi nombre es Estefanía y esta es la historia de mi pequeña Laida.

Laida tenía que haber nacido el 6 de octubre del 2016 pero nació de forma prematura un 20 de julio. La primera vez que escuché las siglas CIR (crecimiento intrauterino retardado), fue el 28 de mayo de ese mismo año. No se me olvidará nunca el doctor, eminencia en ecografías dopper en el Hospital de Cruces de Bizkaia. Todo mi embarazo lo llevé tanto por lo privado, como por la Seguridad Social. Fue en lo privado donde me detectaron el CIR, y menos mal, porque según las ecos de la Seguridad Social todo iba muy bien. El privado me hizo un informe para que fuera a la parte pública y lo volvieran a valorar. Estaba de 20 semanas y justo ahí empezó mi calvario. Comenzamos con análisis de orina de 24 horas y protocolo en CIR y ecos cada quince días. A los pocos días, el 12 de junio ya estaba en CIR 2, ahí cambió el protocolo y las ecos eran cada semana.

Quedaba ingresada

Solo llegué al 5 de julio y ya estaba en CIR 3, Nos comunicaron que me quedaba ingresada. Mi hija solo pesaba 480 gramos aproximadamente, me ponían las correas cada 2 horas, me inyectaros tres dosis de cortisona para expandirle los pulmones y las ecos eran cada 72 horas. Por mi habitación pasaron psicólogos matronas, pediatras neonatólogos, como Alberto, el jefe de neonatología del Hospital Universitario de Basurto, en Bizkaia. Sorprendentemente cuando me inyectaron la cortisona me dijeron que mejoraría, y así fue. Bajé a CIR 2 pero, en 24 horas volvíamos a CIR 3.

Alberto, el jefe del servicio de neonatología, vino a la habitación y me informó de todo el proceso por el que iba a pasar mi niña y nosotros. El mismo me confirmó que mi hijo mayor también fue un CIR y que de milagro nació con 42 semanas pesando 2500 gramos, pero que mi placenta con 30 años aguantó más, pero con Laida y mis 40 años mi placenta estaba mal y ya apenas le filtraba alimento a la niña.

Laida mano

A quirófano

El día 19 de julio, como el resto de los días, me quedé en ayunas para hacerme la eco. Estaba en CIR 3. Transcurrió con normalidad la ecografía, pero cuando salimos, el doctor me dijo: “Estás en CIR 4, hay que sacar a la niña, te preparamos y nos vamos a quirófano ya“. Palabras textuales. Y así fue, mi niña nació con 28+6 semanas de gestación con un peso de 580 gramos. Hablaron con nosotros y nos dijeron que con 500 gramos es poco viable y que frecuentemente no sobreviven, que harían todo lo posible pero que lo tuviéramos en mente esa posibilidad. Mi hija pasó tres sepsis generalizadas, rotavirus que casi no lo cuenta, dos trasfusiones, displasia pulmonar y un largo etc. de cosas que no me acuerdo del nombre. Frente a todo pronostico, mi hija, y sí, mi hija y el gran equipo medico que hay detrás, hoy Laila, está con nosotros.

Laida canguro mamá

Secuelas

Aun nos quedan algunas secuelas, pero son transitorias, tiene retraso del habla, hablando “alemán avanzado” (en su idioma, que solo la entiendo yo) y aún usa pañal. Poco a poco ella esta logrando todo lo que se ha propuesto conseguir, y sus ganas de vivir, es nuestra alegría. Con ella no hay tristeza, no hay dolor, solo felicidad. Ella salió de neonatología después de 74 días, con sus noches y sus amaneceres. Pesando 1750 gramos.

Ahora en diciembre de 2019 tiene 3 añitos y casi 5 meses pesa 12,5 kilos y mide 94 centímetros. Laida solo nació con 31 centímetros, estuvo 5 meses de LME (Lactancia Materna Exclusiva), yo me sacaba la leche cada 3 horas poniendo alarmas. No estábamos para perder ni un gramo y yo necesitaba saber lo que comía. Teníamos también bastante reserva en el congelador ya que estuvo tres veces con suero parenteral, sus tripitas se detenían, pero tenía que seguir estimulándome. El cardiólogo al mes nos dio el alta. La neuróloga al año. La neonatóloga también nos dio el alta y continuamos con el protocolo CIR hasta los 4 años. Laida está perfecta.

Laida 28+6

Saludos a tod@s confiar en vuestros pequeño@s son mas fuertes de lo que pensamos.

#lavidadeunprematuro